Chris Sánchez, el placer de vivir del blues

Por Alejandro Vargas.

 

Morelia, Michoacán, 11 de mayo de 2020.-  Pocos son las personas que tienen el placer de vivir de tocar la música que le gusta, tal es el caso de Chris Sánchez que desde pequeño busca endulzar los oídos de aquellos que escuchen su música y que escuchen el blues.

Chris trae el blues desde la cuna, pues curiosamente nació en un suburbio de Evanston de Chicago, Illinois donde surgió este género musical; y  desde que tiene memoria siempre ha estado en grandes festivales de blues, donde la emoción de la gente, el enorme ruido y los músicos haciendo lo suyo, retumban entre sus recuerdos más profundos.

 

Chris Sánchez platicó sobre sus inicios en la música y la evolución que ha tenido en la misma (Foto cortesía)

Sabemos que tu papá es músico,  ¿influyó mucho en ti para que te fueras por esta vertiente musical?

Claro que sí, completamente. Él nunca se dedicó tan formalmente a la escena, siempre ha sido músico, pero jamás se había dedicado profesionalmente como lo hace ahora. Me acuerdo de su influencia a través de videos, mediante discos y sobre todo, con su armónica que toda la vida ha tocado, entonces pues de alguna forma me transmitió el gusto.

Platícanos, ¿cómo fue el proceso de venir a vivir a México?

Viví varios años en Estados Unidos, nací, crecí y hasta los 7 años mi familia y yo nos venimos para acá (Morelia). Entonces actualmente acabo de cumplir 21 años aquí en México. 

En qué momento y cómo nace Chris Sánchez blues band, con casi 10 años de trayectoria

Sí ya va para 10 años. La cuestión es que me interesó la guitarra desde que era niño, empecé a tocar líricamente, pero una vez aquí en México me acuerdo que mi papá me llevó con su compadre llamado Daniel Farías y es el que realmente me guio, me ilustró y me dio los primeros pasos para tocar ya de manera más profesional. 

Fue tanto mi gusto que me motivé mucho, ya tenía el hambre de querer tener una banda y estar tocando en bares., pues mi papa es armonista, pero como él tenía tantas ganas de tocar, me acuerdo que le compré una batería chiquita para niños y lo puse a tocarla y mi hermano siempre ha sido guitarrista pero a este compadre, le compré un bajo y un amplificador, entonces le dije a mi hermano que agarrara el bajo y yo empecé con la guitarra, a cantar; hubo un plan elaborado inicialmente, pero empezamos a ensayar canciones y dije “que tal si nos formalizamos un poco más”, así fue el inicio de la banda.

¿Actualmente, con cuántos integrantes cuenta la banda?

Actualmente con 4, mi hermano se fue a Estados Unidos hace casi 3, entonces mi papá escuchó a una bajista que se llama Cristal Rodríguez, le gustó mucho su estilo, me la presentó, comenzamos a ensayar con ella, estuvimos muy a gusto y pues la incluimos especialmente a la banda. Posteriormente un año después empezamos a tocar con un organista llamado Yorgen y también nos gustó mucho su estilo, así que se quedó.

Sobre este proyecto ¿Cuáles han sido algunos de los mejores momentos que han vivido como banda?

Ha habido momentos muy buenos que han definido cosas buenas para la banda, simplemente el hecho de compartir festivales internacionales, con artistas de dicha talla, la experiencia de convivir con ellos, además practicar lo que aprendes cómo persona y como músico. 

Pero una experiencia que nos gusta mucho como banda fue haber tocado en el festival del globo de Yuriria, estuvo muy bien, cuando salieron al escenario dos bandas antes de nosotros no habían tantas personas, pero luego empezaron a llegar y a llegar y cuando nos subimos nosotros, me sentía como un rockstar porque se veía muchísima gente hasta atrás. Estuvimos tocando con esa vibra de estar frente a tantos, parece que se registraron como 10,000 personas.

¿Cuáles son algunos de los retos a los que se ha tenido enfrentar la banda?

Un reto que seguimos teniendo es precisamente el género que manejamos que no es tan popular, tan comercial; es curioso nuestro un ritmo de trabajo como si tocáramos música popular pero no es así, entonces cuando tenemos presentaciones en lugares más comerciales, la gente quiere escuchar las bandas a las que están acostumbradas, por lo tanto se vuelve un poco difícil el ambiente. Tú tienes tu propuesta y las personas quiere escuchar lo de siempre: The Creedence, The Doors, que están muy bien, me encantan, pero nosotros tenemos nuestra propuesta, por lo tanto es un poco incómodo, le batallamos con esta cuestión de que casi  no hay difusión del blues,  por ello nosotros nos sentimos comprometidos con esa labor.

¿Qué significa para ti vivir del blues?

Hay de dos partes: la que más me gusta y la que tengo en cuenta que es, que yo vivo totalmente de esto. Entonces, es un placer vivir de tocar lo que me gusta, porque es diferente cuando te ganas de la vida de la música, pero no te gusta lo que tocas, aunque claro es chamba, lo entiendo porque yo también lo hecho; sin embargo, yo hacerlo con el género que me encanta, componer para mis discos con música original y aparte que me paguen, es muy buena esta parte y por otro lado hacer un doble esfuerzo para que la gente pueda digerir esta música un poco más.

Hablaste hace un momento de la música comercial, como el reggaetón y el grupero, ¿qué opinas tú de estos géneros?

Obviamente, y personalmente, no me gustan; realmente no se trata de una corriente de que el reggaetón o la banda son para los nacos o para gente sin cultura, yo no me atrevería a decirlo así, simplemente tomando las palabras de mi mentor Daniel Farías “le hice la lucha para escucharlo pero no me gustó”. 

No son canciones que yo tendría en mi celular e iría escuchando en la combi o que pondría en la casa para hacer de comer, es música que realmente no me nutre. No me llega ese sentimiento que me gusta encontrar en la música.

¿Qué nuevos retos siguen para Chris Sánchez a nivel personal y profesional?

A nivel personal son muchos, crecer como persona, cambiar hábitos para poder desarrollar mejores cosas en cuestión de todo tipo, por ejemplo hablando más específico en cuestión musical, me gustaría seguir estudiando  y preparando. Mucha gente me dice que soy un buen guitarrista sin embargo, yo no quiero creérmelo y decir que así me quedo. Obviamente uno conoce sus limitantes, uno sabe hasta donde puedes llegar y entonces eso me motiva para decir “si esto es mi limite, me gustaría que fuera más allá ahora”  y así seguir avanzando siempre. Me encantaría dominar el género hermano del blues que es el jazz, ser más técnico y mejorar en mis territorios musicales. 

También va de la mano de Chris Sánchez blues band, ahorita estamos en fase de componer nuevas canciones, en nuestros ensayos a veces se nos van dos horas en un pedacito de canción porque queremos hacerlo lo mejor posible, que sea el mejor álbum hasta la fecha de la banda. Próximamente aparte del nuevo disco, visualizamos giras, visitas al extranjero, subir más videos, más canciones en línea, estar haciendo material de distintos estilos.

¿Dónde podemos encontrar tu música?

En Facebook tenemos nuestra página “Chris Sánchez blue band”, ahí pueden encontrar algunas canciones por medio de las pestañas que vienen. En Spotify ahorita nada más tenemos una canción que subió una empresa que realizó un acoplado de bandas nacionales de blues y nosotros participamos con una canción original exclusivamente para ese disco. Próximamente esperamos estar en todas las plataformas, además de que cada miércoles tocamos en el bar Cactux, aquí en Morelia, Michoacán.

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