El mediocre guion de la CONCACAF…

 

Artículo escrito por: Ángel Almada Garmendia

 

 

Bien dicen por ahí que todos los caminos llevan a Roma, pero en lo que al futbol de CONCACAF se refiere, todos los partidos llevan al VAR, a la ayuda digital que, en cotejos como el presentado la noche del 2 de febrero, tendría que servir. Por enésima ocasión, una inoperante escuadra mexicana sale bien librada, ante una digna selección de Panamá que, en la mayoría del juego, controlaba los sectores del campo.

El equipo dirigido por Gerardo Martino derrota por la mínima diferencia, a causa de un penal inexistente cometido a Diego Lainez, y ejecutado por el delantero del Wolverhampton, Raúl Jiménez, a una escuadra panameña que se plantó en el Estadio Azteca a realizar lo que mejor sabe hacer: controlar el balón e inquietar al rival.

Fuera de Hirving Lozano y Gerardo Arteaga, el equipo nacional no encuentra la fórmula para realizar un juego agradable al ojo público. Tener la posesión del esférico sin idea colectiva es la constante táctica de los aztecas en partidos recientes. El triunfo en Jamaica de 2-1 fue fortuito, y el empate a cero goles ante los costarricenses manifestaba aún más la señal de alarma de que algo no funciona en la Selección. Más allá de parados tácticos o acomodo de jugadores, el máximo impedimento es, en opinión de un servidor, la ausencia de una mentalidad ganadora, seria y propositiva.

 

 

Celebración del único gol vs Panamá. Fotografía de: Federación Mexicana de Futbol

 

¿Culpables? Muchos argumentarán que el responsable del problema es Gerardo Martino, casado con las llamadas ´»vacas sagradas» del Tri, y otros tantos despotricarán en contra de los futbolistas que, por mucho que jueguen en Europa y ganen millones en el viejo continente, no rinden al máximo ni tienen la actitud necesaria para vestir dignamente la camiseta nacional.

Ambas posturas son totalmente válidas y aplicables, pero siendo realistas, con el nivel mostrado en la presente eliminatoria, en partidos de matar o morir en una justa mundialista, con rivales menos piadosos que Jamaica, Panamá o Costa Rica, la Selección de México obtendrá una sola cosa: ir de paseo a Qatar, y regresar más pronto de lo que tardaron en llegar, en el eterno y malacostumbrado guion de mediocridad en la CONCACAF.

 

Puede que también te guste...