Por: Jorge Hernández Díaz
Aserrín, «tierra de muerto», las velas encendidas, y llorando al muerto, la pandemia del Covid-19 aún sigue presente, lo que no ha permitido hacer muchas cosas, una de ellas, el visitar a los seres queridos que descansan en paz en los panteones, y una de las dudas es, si están cerrados ¿cómo se van a poder ir a ver?
La señora Pompeya Ortíz Gaytán consciente de eso, sabe que está vez no podrá ir a ver a sus familiares, o estar con ellos.
En años anteriores, aunque no tenía un día en específico en el que vaya, la señora Pompeya menciona que aproximadamente llegaba al campo wanto desde las 10 de la mañana y estaba hasta las 4 de la tarde, junto con sus tres hijos ,o a veces dos; se llevaba su silla, una sombrilla, compraba unos cacahuates “de a montón”, ponía flores a su esposo y a su mamá, para después contemplar lo que pasa a su alrededor.
“Solo estoy un rato, veo a la gente pasar, veo hasta familiares míos, conocidos más que nada y los saludo”, platica Pompeya, quien además menciona que por lo regular siempre iba a ver a otros de sus seres queridos que se encuentran en panteon sus familiares, pero a sus 75 años de edad, prefiería ir temprano para evitar las aglomeraciones y el intenso sol.
Ahora por la contingencia, Pompeya no pensó en poner ni un pie en el panteón, pues asegura que pese a su edad aún no quiere morirse y prefiere no salir de su casa, al menos para las cosas necesarias.
“Sin duda alguna el no poder ir al panteón significa un golpe duro, tanto a nuestras tradiciones, costumbres y creencias, esta pandemia ha limitado muchas de las actividades que se realizaban, pero aquí la cuestión es que tanto nos importa el cuidarnos ante este virus. Tal vez las personas jóvenes no se preocupan o muy poco, pero ya personas, madres o padres de familia ya tienen que valorar más tanto su vida como su salud, ya que si no nos cuidamos nosotros nadie nos cuidará y para estar enfermo mucho tiempo, solo por ir a ver a nuestros muertitos, como que no, así que mejor quédense en su casa y que se cuiden”, recalcó.
La señora Pompeya insistió en que prefiere cuidarse en medio de esta pandemia, a ir a visitar de manera presencial a sus muertitos, que, dijo, siempre estarán ahí.
